Hace tiempo, en el teléfono, una voz potente me insultò y se  negó a darme una entrevista, fueron años de buscarlo, escuchar versiones de una personalidad fuerte y hasta violenta, no era para màs, el personaje  era el Dr Arturo Angulo Gallardo, pieza clave del Grupo SEMEFO, que habrìa que catalogar como uno de los performers que cambiaron el arte acción en Mèxico.

El grupo Caramelo Pesado hizo su último concierto, en el escenario un joven, con una llave estilson destruyò un electrodomèstico y le prendìò fuego; los presentes presenciaban el nacimiento de SEMEFO, y el rumbo del performance en nuestro paìs.

Carlos Jaurena, Carlos Blas Galindo y Cuauhtèmoc Medina reconocen en èl la esencia de SEMEFO, Angulo hacìa que pasara algo en el escenario, sus compañeros mencionan los abruptos cambios en la secuencia de los performances que provocaba, los arrastraba a la improvisación, aùn se recuerda el caos que estimulaba el Doctor, se admira su coherencia al respetar las reglas que establecía para sus acciones, Juan Pernas, de SEMEFO, recuerda los golpes que se llevò del público por la voràgine de Arturo, no olvidan al asistente ensangrentado del Museo del Chopo ni sus colaboraciones con el Mago Melchor.

Lavatio Corporis, la instalación en el Carrillo Gil, plasmò la beca de Jóvenes Creadores del FONCA solicitada por Angulo, los videos performances filmados en el Manicomio de la Floresta, tenían como actor principal su cuerpo, cuando los cadáveres fueron tratados como materia artìstica, no hubieran sido posibles sin su conocimiento forense. Angulo fue elegido para visitar España y Francia con la obra de SEMEFO, al volver el grupo desapareciò.

Hoy su andar es apresurado, no se cansa de caminar ni de enseñar, recuerda con cariño a quienes lo trataron bien, con reserva a quienes son lejanos en la creaciòn artística. Arturo Angulo comparte galerías con los mejores grabadores del paìs, èl mismo lo dice: “Expongo con los mejores”, simplemente por que es uno de ellos.

Larga vida al Dr Angulo, “El Ave de las Tempestades”.