Hoy por la tarde el apóstol de la Democracia, el San Benito de Palacio Nacional, el Juan Diego del Bienestar, Andrés Manuel López Obrador, reapareció en un mensaje a la nación. En él aunque un poco mormado se le escuchaba bien, hasta eso casi tan coherente como en sus conferencias mañaneras y contó que hablando con Ingenieros Militares durante una extensa gira por el sureste se quedó dormido, le dio el váguido. No perdió el conocimiento pero tuvo una experiencia mística en la que vio a Quetzalcóatl que lo felicitó por comprarle las plantas a Iberdrola y le dijo… si lo sueñas hazlo… así que AMLO que soñó que tenía un museo sobre Francisco I. Madero y pues llegando a Palacio Nacional lo construyó. Dijo que durante este váguido Quetzalcóatl le mostró como vivían enemigos suyos como Carlos Alazraki y Raymundo Riva Palacio.
Allí pudo verlos solos y con mala entraña, así que solo pudo sentir amor por ellos. El Presidente AMLO aún tiene COVID pero no descarta que ahora en sueños lo visite la serpiente emplumada y lo lleve a conocer el México del futuro, el México Tenochitlán en el que las cabezas de los conservadres se encuentren colgadas en las plazas públicas.