Murió Don Charlie Romero Deschamps y la industria petrolera mexicana está de luto, igual que la democracia, la justicia… y también Ferrari, American Express, Cartier, John Ford, Bugatti, entre otras marcas destinados a los nobles hiper ricos que gobiernan el mundo. Don Charlie fue un hombre que vino desde abajo, que empezó como chofer que la Quina pero su amor a la patria lo hicieron ascender hasta convertirse en el Jeque del petróleo mexicano… un hombre admirable, que pagaba los lujos de sus hijos, sus viajes, autos, lofts… con dinero de nuestro petróleo. ¡Qué gran hombre!.
Pues ya muerte lo agarró casi descalzo porque ya al final cobraba muy poquito, aún así, anunciaron sus allegados, que con los “ahoritos de toda su vida”, se pagará un lugar digno en donde puedan reposar sus restos.
Carlos Romero Deschamps será enterrado en un Lamborghini de recubierto de oro de 24 kilates con algunas incrustaciones de diamantes de sangre. Esto será en una pequeña propiedad que tiene en Montecarlo, sobre la cual…se va a erigir una torre petrólera hecha de platino. En su humilde tumba será enterrado con 200 barriles de petróleo y 20 de sus más fieles sirvientes. También tendrá una placa que al pie se leerá: Prócer de la nación.
