Sabemos que netflis saca contenido como tú espero, te cambias calzones. La mayor parte de ese contenido es perfectamente olvidable aunque de vez en cuando, aparecen joyas como Samurai de ojos azules.
Esta animación que de a ratos es 2d, otras tantas veces en 3d, nos traslada al Japón medieval, un Japón que a toda costa se trataba de mantener aislado, sin contacto de occidente. Recordemos que hacia 1549 llegaron los Jesuitas a Japón y luego fueron expulsados oficialmente en 1620. Entre las dos fechas, los misioneros fueron perseguidos, crucificados, ahogados y expulsados. Aunque los hubo que tercos permanecieron en la clandestinidad… “difundiendo” la palabra de su Señor.
Samurai de ojos azules se ubica en la etapa posterior a esa expulsión, en un Japón que rechazaba a los occidentales y más aún a los hijos mestizos, un niño o niña blanca y de ojos claros pero con rasgos japoneses era considerado un demonio, un ser inferior… peor que un perro. Esta es la historia de una niña mestiza llamada Mizu, que debe aprender a esconder su feminidad, su identidad y sobre todo sus ojos azules.
Su vida miserable y doliente desde el primer minuto, se encuentra consagrada a vengar a su madre que fue violada por 4 hombres occidentales, que la engendraron y condenaron a caminar entre insultos, vejaciones, persecuciones y burlas. Mizu es adoptada por un famoso espadero ciego e incapaz de notar la fealdad de Mizu. Junto a él aprenderá el arte de las espadas, a crearlas pero también blandirlas… a ser implacable y dirigir su odio como el motor de su vida. Un monstruo voraz que cabalga entre tinieblas para saciarse de sangre y tripas de quienes la condenaron.
Durante la serie somos testigos de su camino plagado de enfrentamientos al estilo Lone Wolf and Cub… el famoso manga hiperviolento en donde un padre y su hijo, a quien lleva en una carreola, tienen que enfrentar a los Ronins más sanguinarios.
Sangre a cubetazos, brazos cercenados, tripas que escurren, cráneos que se pulverizan, puntadas con aguja e hilo después de cada batalla… son una delicia visual pero no la única. Escenas en prostíbulos que muestran todo tipo de filias, incluida la del famoso cuadro de Katsushika Hokusai, El sueño de la esposa del pescador, que incluye un pulpo. Paisajes espectaculares con tomas y planos que te dejan pendejo y te enchinan el cuero… o te encueran el chino según veas.
La serie tiene una gran maestría narrativa que te deja helado en el episodio 5… “El Ronin y la novia”, en donde atamos cabos con la historia de Mizu mientras nos muestran una representación Bunraku (de marionetas), que cuentan el odio ciego de un Ronin sobre los asesinos de su Señor y, una promesa que no está dispuesto a romper… a pesar de que por ello debe asesinar a su propia esposa e hijo.
El guión de Michael Green (Logan) y Amber Noizumi, es rompe madres, hermoso y violento, el camino en espiral del dolor y la destrucción… como Ran de Kurosawa.
Aquí la recomendamos como un serie que debes ver de un tirón y luego… volver a ver poco a poco con sake en las venas.