Anoche 300 mil fanáticos al ska y la cumbia villera abarrotaron el zócalo para ver a Los Fabulosos Cadillacs, muchos de ellos dejaron a sus “bendiciones”, “chilpas” o simplemente a sus hijos con sus abuelos, esto con la promesa de pasar “más tardecito por ellos”. El resultado es que hoy por la mañana se han visto a miles de adultos mayores saliendo a la tiendita de la esquina para comprar cosas que ya no acostumbran tener en su refri o alacena: “Galletas, leche con chocolate, yogurt con cereal o m&m’s, entre mucha chatarra más”.
Los adultos mayores así mismo han tenido que dejar a los niños en un cuarto con su Tablet, para ellos poder tener un momento de tranquilidad en la sala. Sin tener que ver influencers, cosplayers, caricaturas que parecen salidas de un sueño ácido ó canales de youtube como mojo u otro más que tiene los 10 animales más extraños de todo el mundo mundial.
Por otro lado se reportó una gran afluencia en hoteles de las cercanías al centro histórico por lo que deducimos aquí en Letra Gorda, muchos de esos papás regresarán una vez vencida “dicha habitación”.
