Jaime Maussan se paró en el recinto Legislativo con todo su “aplomo” de hombre de verdad, acompañado de sendas cajas que traían a dos “esculturas […]
Jaime Maussan se paró en el recinto Legislativo con todo su “aplomo” de hombre de verdad, acompañado de sendas cajas que traían a dos “esculturas […]