Su pecho no es bodega como el de nuestro Sultán de la libertad, nuestro gladiador de la democracia, nuestro Quetzal de bellas plumas y justicia […]
Su pecho no es bodega como el de nuestro Sultán de la libertad, nuestro gladiador de la democracia, nuestro Quetzal de bellas plumas y justicia […]